El sector inmobiliario se abre a la era digital

Una de las constantes en la historia de la evolución de las especies es que solamente aquellos que se adaptan con rapidez y eficacia a los nuevos escenarios logran sobrevivir. No queremos ponernos tremendistas pero esto es, precisamente, lo que está sucediendo en buena parte del tejido empresarial global. La digitalización de los negocios no deja ningún sector al margen, incluyendo un mercado tradicionalmente poco propicio a los cambios como el inmobiliario. Estas compañías se han visto obligadas a reconsiderar tanto su estrategia comercial como su cultura corporativa para colocar al cliente en el centro de una experiencia más interactiva. 

La transformación digital no tiene por qué enfocarse como un trauma o como un mal menor. También resulta un tanto erróneo pensar que este tipo de estrategias solo atañen a las empresas de nueva factura o a las que están atravesando serias dificultades. Más bien sucede todo lo contrario. Precisamente, los expertos recomiendan a las compañías que aprovechen cualquier ciclo expansivo para acometer el  tránsito hacia un modelo mucho más digitalizado. Se cae así uno de los grandes tópicos de los últimos años, cuando, en el contexto de la crisis económica, se vendían las nuevas tecnologías como una terapia para firmas con dificultades.

A nivel global, el sector inmobiliario ha empezado a organizar importantes foros para abordar los desafíos que ya están sobre la mesa y los que podrían sumarse en los próximos años. La lógica es bien simple: si los clientes han cambiado significativamente su manera de consumir en casi todos los ámbitos, ¿por qué el mercado inmobiliario debería ser diferente? En este sentido, las compañías que actualmente detentan el liderazgo mundial en los diferentes segmentos comerciales solo podrán conservar tan deseable estatus de la mano de las posibilidades digitales. Engel & Völkers, por ejemplo, hace tiempo que entendió esta realidad. 

En cualquier caso, el sector está todavía un tanto lejos de consumar el viraje hacia los nuevos entornos de negocio. De hecho, los últimos estudios publicados muestran, incluso, una fotografía profundamente contradictoria. Así como el 83% de las marcas inmobiliarias reconocen que las nuevas tecnologías supondrán cambios muy profundos en su actividad, el 74% asegura no haber hecho nada todavía para implementarlas. Salta a la vista que la era digital es vista como un paso ineludible pero solo las empresas de referencia se han tomado muy en serio un proceso que, tengámoslo claro, no se va a detener. 

Engel & Völkers puede presumir de haber puesto el acento en la mejora de la experiencia de los usuarios. Hace ya algún tiempo que puso en marcha una aplicación genérica para buscar y comparar inmuebles en base a diferentes criterios de búsqueda. Más recientemente, la inmobiliaria alemana ha presentado una aplicación específica para propietarios. Con esta aplicación, los clientes interesados en vender sus inmuebles recibirán un servicio exclusivo durante el proceso de venta, con información puntual y permanentemente actualizada. Una de las funciones de la aplicación es, por cierto, la comunicación directa con el consultor inmobiliario. Todo ello con un diseño sencillo e intuitivo.