En el primer trimestre de 2021, Engel & Völkers Mallorca registró un 66% más de consultas online que en el mismo periodo del año anterior. “Este récord histórico de consultas de posibles compradores es un reflejo del gran interés que despierta Mallorca entre los clientes, incluso en tiempos complicados como los actuales”, señala Florian Hofer, director general de Engel & Völkers Baleares. “El coronavirus ha establecido un nuevo orden en las prioridades de los inversores inmobiliarios que anteponen cada vez más la privacidad de la vivienda y su sostenibilidad. El respeto de la construcción con el medio ambiente es uno de los factores que tienen más en cuenta a la hora de tomar una decisión de compra", subraya Hofer. Y, en este sentido, el mercado mallorquín cumple con las expectativas de los inversores y confirma la fortaleza de su sector inmobiliario premium.
Engel & Völkers Mallorca cerró el año 2020 con un volumen de intermediación de 410 millones de euros, con un descenso desde los 470 millones de euros registrados en 2019 debido, principalmente, a las restricciones de movilidad. El precio medio de las viviendas comercializadas por Engel & Völkers se situó en 1,6 millones de euros, lo que supone una subida desde los 1,5 millones de euros de media del año anterior.
En la capital de la isla se están acometiendo importantes inversiones para la modernización de infraestructuras, así como la puesta en marcha de proyectos de movilidad más respetuosos con el medio ambiente. Esto ha incrementado el atractivo de Palma de Mallorca, especialmente entre los clientes que buscan un hogar sostenible en el Mediterráneo con una elevada calidad de vida y cuya inversión tenga potencial a largo plazo. La mayor demanda se centra en áticos, apartamentos con terrazas y balcón y propiedades de obra nueva con elevados estándares de calidad y sostenibilidad.
El año pasado, el precio medio de venta de los apartamentos en la ubicación prime del distrito de Génova, en los alrededores de Palma, se incrementó hasta un millón de euros, mientras que los precios medios de las localizaciones más exclusivas del casco histórico de la ciudad se mantuvieron en los 800.000 euros. En el moderno barrio de Portixol, los precios medios de los apartamentos también oscilan entre los 700.000 y 800.000 euros.
“El Covid-19 ha provocado un cambio de mentalidad de los compradores hacia las viviendas más sostenibles hasta llegar a considerarse como un factor fundamental a la hora de realizar la inversión”, explica Hans Lenz, director de Engel & Völkers Mallorca Suroeste y presidente de la Fundación para la Conservación de Mallorca.
Port Andratx, Santa Ponsa, Bendinat, Portals y Son Vida son las zonas más demandadas de la isla, donde las propiedades de lujo con vistas al mar que combinan arquitectura moderna y elementos mediterráneos son especialmente buscadas por familias y empresarios que se sienten cada vez más atraídos por la isla para residir todo el año. En 2020, las villas en el exclusivo Port Andratx alcanzaron un precio medio de venta de 4,3 millones de euros. Por su parte, en la comunidad de villas de lujo que conforma Son Vida junto a sus famosos campos de golf, el precio medio de venta se situó en 4,7 millones de euros.
“Mallorca ofrece una elevada calidad de vida y es percibida por los compradores de vivienda como una inversión a largo plazo, tanto para la adquisición de una residencia habitual como vacacional”, destaca Christina Deutsch, directora de Engel & Völkers Mallorca Central y Sur. La pandemia ha despertado una creciente preferencia por casas y apartamentos con amplitud de espacios y grandes áreas al aire libre con vistas al Mediterráneo o la Sierra de Tramuntana.
Las casas de campo y fincas en la región de George Sand y Deià alcanzaron precios medios de 2,9 millones de euros en 2020, mientras que en el Puerto de Pollensa y Alcùdia se situaron entre los 1,5 y 2,5 millones de euros. Por debajo de dos millones existen villas y fincas en las zonas más privilegiadas de Artá y Colonia Sant Pere que, con un coste de 1,7 millones de euros, ofrecen potencial de revalorización.
Al sur, en Cala Blava y Son Veri Nou, el precio medio se sitúa en 1,6 millones de euros, mientras que en Santanyí y las fincas en las zonas costeras alrededor de Cala Llombards y Porto Colom registran un coste de 1,65 millones de euros. La ubicación más cara en el centro de la isla es Santa María, donde el precio ha subido hasta los 1,85 millones de euros.
“El deseo de viajar se ha intensificado durante los meses de bloqueo y ha propiciado que los compradores tomen las decisiones de compra más rápido. Las restricciones de movilidad han consolidado los recorridos virtuales a las propiedades como parte esencial del proceso de adquisición”, afirma Nils Haase, director de Engel & Völkers de Mallorca Sureste. En esta zona de la isla, el volumen de transacciones de la inmobiliaria ha subido un 30% en 2020 respecto al ejercicio anterior, hasta totalizar los 27.000 recorridos virtuales en 3D y realizar 300 visualizaciones en vídeo.
De este modo, los compradores del norte y centro de Europa volvieron a dominar las operaciones realizadas por la inmobiliaria en 2020. La mayor parte de los clientes de Engel & Völkers son de Alemania (63%), Reino Unido (12%) y Países escandinavos (6%). Los españoles acaparan el 8% de las transacciones realizadas, seguidos de los suizos (3%) y austriacos (2%).
Teniendo en cuenta el elevado número de consultas de los clientes en los primeros meses del año y, con la experiencia de años anteriores, los expertos de Engel & Völkers confían que el mercado inmobiliario mallorquín tendrá una evolución positiva en lo que resta de año.
“En 2020, el sector más premium fue especialmente dinámico, con precios de venta que oscilaron entre los ocho y 12 millones de euros. Los clientes de alto poder adquisitivo tienden a invertir en propiedades exclusivas con precios que no evolucionan según la tendencia del ciclo económico”, afirma Hans Lenz. “Las crisis anteriores nos han demostrado que los inmuebles en las mejores ubicaciones de Mallorca son ajenas a las fluctuaciones del mercado y se mantienen como una inversión sólida y segura a largo plazo”, confirma Florian Hofer.
