Esquí, deportes de nieve y montaña en Cerdanya

El invierno es la época ideal para disfrutar de los deportes de nieve en la Cerdanya. Esta privilegiada comarca del Pirineo catalán cuenta con grandes instalaciones para la práctica de estos deportes.

El esquí, gran motor económico de Cerdanya

Sin ninguna duda la comarca de la Cerdanya es una zona de esquí por excelencia. En un radio de 30 kilómetros cuenta con más de una docena de estaciones de esquí alpino, nórdico y de montaña, que son un motor económico de las comarcas del Pirineo, creando riqueza y puestos de trabajo, que generan un impacto enormemente positivo para la comarca:

-Son generadoras de ocupación tanto directa, como indirecta, tanto en la propia comarca como en las limítrofes.

-Son un polo de atracción de actividades económicas diversas en el territorio (deporte, ocio, turismo, hostelería, comercio, servicio …)

-Fijan habitantes al territorio evitando el despoblamiento.

-Son un elemento fundamental para el mantenimiento de las infraestructuras de comunicaciones entre los territorios de montaña y las capitales.

-Son generadoras de oportunidades de futuro y prosperidad en las zonas donde están ubicadas.

Según el “Llibre Blanc de les Estacions de Muntanya de Catalunya” de la Generalitat de Catalunya, publicado en el año 2020, la práctica del esquí, en cualquiera de sus modalidades, genera una actividad económica en Catalunya de más de 374 MM €, que equivale a una media de 59 MM € por cada estación catalana. De esta actividad, el sector más beneficiado es la hostelería, que recibe casi el 60%, seguido del transporte algo más del 15%, un 15% también para las compras y un 10% para otras actividades.

Y para terminar con las cifras, hay que destacar el gran efecto multiplicador que los deportes de nieve generan en la economía de los territorios. Por cada euro ingresado se producen 5,3 € y hasta un total de 9,1 € por cada euro gastado.

Diferentes opciones para esquiar en Cerdanya: alpino, nórdico o de montaña

Lo primero que destaca en esta estación es su carácter familiar. Todos pueden esquiar en La Molina debido a que posee pistas con distintos grados de dificultad e instalaciones de alto nivel para el esquí adaptado para discapacitados. En total, cuenta con 68 pistas, que suman 71 kilómetros de extensión esquiable. A su vez, las pistas ocupan las laderas este y norte de la montaña Tosa d'Alp (2.537 metros) y las este, oeste y norte del Puigllançada (2.409 metros).

Es una de las estaciones mejor comunicadas tanto por carretera como por ferrocarril y cuenta con todos los servicios complementarios al deporte del esquí: desde restaurantes y cafeterías a tiendas de venta y alquiler de material deportivo. Pero, y sin restarle importancia al esquí, y para quienes no quieran practicarlo, pueden realizar otras actividades, como raquetas de nieve, trineos o motos de nieve. Por si todo ello fuera poco, en la zona del Nido del Águila hay un refugio donde se puede pernoctar.

Masella, pura modernidad

La estación de esquí Masella también se encuentra en la Tosa d'Alp, en su caso en la vertiente norte. A su vez, el dominio esquiable se divide en dos partes: Coma Oriola u occidental y Coma Pregona u oriental. Pero la gran diferenciación de Masella es su modernidad. Desde la tramitación de todos sus servicios, su tienda online para evitar aglomeraciones, a los modernos sistemas de generación de nieve, con más producción en menos tiempo, ahorrando energía. Masella se ha posicionado como una de les estaciones más modernas del Pirineo.

Con 74 km esquiables y 578 cañones de nieve, Masella asegura una calidad muy alta de nieve para la práctica del esquí, tanto de día como de noche. Con sus 13 pistas iluminadas, la estación se ha convertido en “La capital del esquí nocturno de los Pirineos”. Además, una vez finalizada la jornada de esquí, cuenta con una atractiva oferta après-ski a pie de pistas, donde se puede degustar la gastronomía de montaña.

Esquí nórdico: tres opciones en Cerdanya

Para la práctica del esquí nórdico en Cerdanya podemos elegir entre Guils Fontanera, Lles de Cerdanya o Aransa.

Guils Fontanera cuenta con 45 kilómetros de pistas con diferentes niveles, diferentes paisajes de pinos negros, prados y claros así como magníficas vistas al valle de Cerdanya.

Por su parte, la estación de esquí Aransa también es maravillosa para la modalidad nórdica. En su caso, dispone de siete circuitos, como el de Pollineras o el de Piedras Blancas. E igualmente permite disfrutar de paisajes boscosos y de claros. Asimismo, ofrece distintas actividades tanto individuales como para grupos o familias, algunas de ellas para realizar con raquetas de nieve.

Por último, Lles de Cerdanya, igualmente dedicada al esquí nórdico y de montaña, dispone de varios senderos señalizados y con distintos grados de dificultad que incluso pueden realizarse de noche. Asimismo, cuenta con un refugio de montaña y actividades petfriendly.

En conclusión, la industria del esquí en la comarca de Cerdanya es un gran motor para la economía local. Además, la proximidad con una gran ciudad como Barcelona, convierte a esta comarca en un destino perfecto para disponer de una casa de segunda residencia y poder disfrutar del deporte del esquí cada fin de semana.